Otra de las dificultades con la que nos solemos topar en una bicicleta es que se desajustan los cambios. Si bien los cambios es un sistema bastante complejo, su ajuste es sumamente sencillo. Para simplificar las cosas no voy a meterme con ajustar los “topes” de los cambios, son unos tornillos que casi nunca hay que tocar.
Generalmente notamos que los cambios están mal cuando no entra el cambio que queremos, a veces al subir los cambios, a veces al bajar.
Para ajustar los cambios actuaremos sobre el tensor en el desviador:
Primero ponemos el cambio en el centro o en el piñón que tengamos problemas. Luego actuamos sobre el tensor primero en un sentido, dando media vuelta, y probando subir y bajar los cambios. Si el problema se profundiza, entonces moveremos el tensor en sentido contrario. Hay que guiarse por el oído, cuando se intensifica el ruido quiere decir que estamos desalineando el desviador con respecto a los piñones.
Así probando de a medias vueltas, encontraremos un punto en que el cambio actúa correctamente.
Generalmente notamos que los cambios están mal cuando no entra el cambio que queremos, a veces al subir los cambios, a veces al bajar.
Para ajustar los cambios actuaremos sobre el tensor en el desviador:
Primero ponemos el cambio en el centro o en el piñón que tengamos problemas. Luego actuamos sobre el tensor primero en un sentido, dando media vuelta, y probando subir y bajar los cambios. Si el problema se profundiza, entonces moveremos el tensor en sentido contrario. Hay que guiarse por el oído, cuando se intensifica el ruido quiere decir que estamos desalineando el desviador con respecto a los piñones.
Así probando de a medias vueltas, encontraremos un punto en que el cambio actúa correctamente.